lunes, 11 de marzo de 2013

¡Bienvenidos!



            ¡Hey Visitante! ¡Bienvenido a mi blog!

  Me alegra tenerte por aquí y espero que, al final, tu también creas que ha valido la pena.

  Antes de nada pero, me presentaré: Me llamo Jöel aunque todos mis amigos me llaman Jowy y en este blog firmaré como "Prometeo" (en la siguiente entrada os explicaré el porqué); nací en el año 92 en Tarragona y, en la actualidad, dedico mi tiempo a estudiar 3º de Comunicación Audiovisual y 1º de Criminología y Derecho todo en la UPF, además, me encanta escribir y, de hecho, ya he escrito algún que otro libro (¡Por el momento 5!). 

  Mi mayor ambición es convertirme en director de cine o bien, sino, ganarme la vida escribiendo. ¿Difícil, verdad?

  Pues bien, yo no soy de los que se dan por vencido tan fácilmente, así que ya veremos al final que es lo que me depara la suerte.

  De cualquier modo, nada de esto es especialmente relevante y si te lo cuento es simplemente para que sepas un par de cosas sobre mi y ya no me consideres como alguien tan extraño o anónimo. Este principio es fundamental, pues quiero dirigirme a ti en todo momento de tu a tu, como si fuésemos viejos conocidos o amigos de siempre; de otro modo, todo cuanto publique aquí sería solamente una aburrida amalgama de información de la que podrías prescindir perfectamente. Así que, llegados a este punto, si aún sigues conmigo. ¡Despierta!

  ¡Préstame atención! ¡Es importante! 

  Ahora voy a contarte cual es el objetivo real de este blog y a introducir el que va a ser mi primer articulo de "interés".

  En primer lugar, debo decirte que si no eres alguien curioso a quien le atraiga aprender todo tipo de cosas nuevas lo mejor que puedes hacer es salir corriendo de aquí. Cierto es que habrá artículos mejores y peores que otros; es lógico, no todo el mundo comparte los mismos gustos ni todos los artículos se escriben con el mismo interés, cuidado, rigor, profundidad u objetividad, sin embargo, si hay un denominador común que sirva como base para definir el blog, éste, es indudablemente el interés por el conocimiento. Pero detente, no te asustes, no hablo de conocimiento como algo complicado; no me refiero a complejas formulas matemáticas, conceptos incomprensibles o enrevesados razonamientos que no deben comprender realmente ni siquiera aquellos que los han formulado. No, nada más lejos. De lo que hablo en realidad es de cultura general, de una de aquellas cosas que tanto pueden servirte para ganar un quesito en una tarde de "trivial" como para lucirte frente a tus amigos cuando hables de algo ligeramente más "refinado". ¿Me sigues?

  Lo que publicaré aquí son cosas varias, cosas que pueden servirte para ampliar tu bagaje cultural y, ¿Porqué no? Quizás también para ver el mundo desde una perspectiva mucho más global e integradora. 

  Si te gusta lo que lees, ¡Enhorabuena! Ya puedes decir que estás conmigo y ya podemos ponernos de lleno en el asunto, así que, ¡Vamos!

  Toma aire y lee la siguiente entrada; allí te explicaré el porqué del nombre del blog, de mi seudónimo y el verdadero significado de uno de los mitos clásicos más fascinantes e interesantes que ha llegado hasta nosotros desde la más remota Grecia.

                                                                                                      Atentamente,  
                                                                                                                               Prometeo

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